sábado, 17 de mayo de 2008

Hélix


Siempre me han fascinado los caracoles. Van a su ritmo hasta los lugares más inverosímiles, dejan huella a su paso y si las cosas vienen mal dadas se retrotraen en su cascarón hasta que llegan mejores tiempos. Envidiables.

5 comentarios:

Marta G.Brea dijo...

...Y pueden caminar sobre superficies afiladas como una hoja de afeitar sin herirse.

Bonita escalera de caracol, como sus conchas marinas.

Feliz fin de semana!

kai dijo...

Igual que cuando me meto en mi coche.

Marta G.Brea dijo...

Jajaajaaa...

Ferran dijo...

Creo que me he perdido Kai. Por cierto la otra maldad(perdón, foto artística) que me enviaste ¿Quién es? Más que nada por saber luego de quién tengo que huir.

Kai Försterling dijo...

Como no tengas cuidado necesitaras un caparazón de esos que anuncias para salir a la calle. Te doy una pista, esta como una cabra y viene de Nules.