martes, 10 de junio de 2008

REFLEXiones


De la huelga indefinida provocada por el sector del transporte al paro intermitente convocado por la Eurocopa. Dos formas diferentes de inmovilizar un país con resultados bien diferentes. La primera origina colapsos en las carreteras por los bloqueos de los piquetes informativos, amenaza con dejarnos desabastecidos de carburante, medicinas, besugos y cervezas, entre otras cosas, y produce al mismo tiempo una sensación de incertidumbre por las consecuencias y duración. La segunda, cuya duración esta acotada en dos horas y provoca euforia, tiene el efecto contrario. Caravanas de vehículos de aficionados que, haciendo sonar su claxon, se lanzan a festejar el triunfo de “la roja”, mientras malgastan el combustible y las cervezas. Las medicinas las consume el sufrido vecino al que los 22 tíos en calzones ni le van ni le vienen; en cuanto a los besugos… me reservo la opinión.

4 comentarios:

Marta G.Brea dijo...

Algo positivo de tus REFLEXiones:

Gracias al paro que afecta también a los pescadores, el besugo vivirá unos días tranquilo y quizá alivie su alto riesgo de extinción.

Y si perdemos en la Eurocopa, mejor ya si es desde el primer partido, pues ahorramos y a algunos quizá le deje de doler la cabeza.

Me voy a repostar...

Ferran dijo...

Dudo que los besugos a los que me refería, que no eran los que tienen aletas, estén en peligro de extinción. Ayer, sin ir más lejos, estaban vivitos y jaleando.

Daniel García-Sala dijo...

A veces si para a reflexionar te cortas las venas.

Kai Försterling dijo...

Como era el dicho indio ese..., besugo bueno, besugo muerto?