lunes, 13 de octubre de 2008

Mutatis mutandis


Se que no importa y la verdad es que ya me estoy acostumbrando. Lo que realmente se me hace más cuesta arriba es el sujetar la cámara con mis dos patas más adelantadas y procurar que no se me arruguen las antenas al llevarme el visor al ojo, casi prefiero utilizar la pantalla trasera para efectuar las tomas. Por lo demás casi todo son ventajas, es una forma nueva de ver las cosas desde otra perspectiva y conoces gente nueva como a Psy, una vallisoletana que estuvo viviendo una temporada de cooperante en Chernobil. Su verdadero nombre es Psyllobora Vigintiduopunctata, aunque perdió parte de sus 22 puntos, por exceso de velocidad, en un control de radar.

1 comentario:

Alberto Tallón dijo...

Ya lo dicen, hay muchas maneras de ver el mundo...por cierto, la de los puntos no tiene muy buen color, son más de fiar las rojas...